Por Padre Pistolas
– Después de la multiplicación de los panes y los pescados los apóstoles regresan a Cafarnaúm y Cristo los alcanza caminando sobre el agua, la gente le reclama que ¿porqué se esconde si lo andan buscando? Y Cristo les contesta que lo buscan porque les dio de comer no porque creyeran en él, no porque creyeron en él si no porque habían comido hasta atascarse y que la obra de Dios consiste en creer en Cristo que es el enviado y el hijo de Dios y que él es el verdadero pan de vida” que da la vida eterna y no el mana, que también lo había enviado Dios y no Moisés “mana era una frase que significa: ¡Que es esto? Y los niños la pronunciaban cuando la comían igual que las codornices.
– Los judíos preferían asegurar la comida, aunque fueran esclavos en Egipto. Me pongo a pensar en las prostitutas, los alcohólicos, los ladrones, los políticos corruptos casi todos, que prefieren asegurar la comida, aunque sean esclavos del pecado y de la injusticia.
– Los judíos querían proclamar rey a Cristo para tener comida para el estómago eterno, mente y sin trabajar y nunca entendieron que Cristo les ofrecía algo mucho mejor, el pan de vida, pero vida eterna, vida de fe, vida superior a la vida terrena, porque ese pan era su propio cuerpo no por ser pan, si hubiera sido mexicano nos habría consagrado tortillas y pulque, pero al fin seria el mismo resultado.
– El campo produce muchas semillas, pero también es obra de Dios, pero la eucaristía no solo se multiplica en todo el mundo y todo el tiempo sino que es algo superior y deberíamos comerlo diariamente, anciadamente y constantemente pero nos falta lo principal “la fe” por eso ni a misa vamos siquiera los domingos y menos vamos a comulgar, me conformaría que si quiera a la hora de los alimentos le diéramos gracias (eso significa eucaristía) a Dios porque hasta la misma vida depende de él, he visto morir gente muy famosa y rica que de nada le sirven la fama y el dinero yo tengo otra riqueza mejor que el oro y la plata, la fe y la sabiduría, el amor, a buenos y malos y no hay quien me las robe como el dinero.
– Cuando tenemos asegurado el pan, nos resulta muy difícil comprender y ayudar a los que no tienen casa, ni comida o a los emigrantes y a los desplazados.
– ¿Cómo tratamos a nuestros indigentes, a los centroamericanos y a nuestros propios parientes alcohólicos y drogadictos? Los discriminamos
– Debemos de recordar que no solo de pan vive el hombre, se requiere la caridad, la justicia, social el empleo, bien remunerado, las políticas públicas, equitativas, porque en esos discriminados también está Dios.
– No solo hay que tener preparados los dientes y el estómago para comer, hay que tener la fe y la disposición de leer la biblia, ir a misa, tener fe y comulgar para tener vida eterna, esa es la diferencia entre Moisés y Cristo.
– Este milagro es el más contado de la historia, además nadie se lo pidió a Cristo él tuvo la iniciativa porque los judíos querían seguir escuchando a este profeta, nosotros no aguantamos ni una hora en misa.
– Eliseo también multiplica los panes porque Dios auxilia a los que piden por los demás.
– ¿Verdad padre los licenciados son como los plátanos? No hay uno derecho.
– Mira hijo, cuando veas uno, llévate un gato si sale de volada el licenciado es que es rata, si sale el gato es que es perro.
– Que Dios los bendiga.