Por: Fernando Pérez Chávez
Busca Reelegirse José Luis López Como Auditor.
Fomento Siete Años la Opacidad y la Corrupción.
Político Perredista Incongruente y Sinvergüenza.
El titular de la Auditoria Superior de Michoacán, José Luis López Salgado es el claro ejemplo de los políticos incongruentes y sinvergüenzas, porque desde junio del presente año anunció que renunciaría al cargo, pero ahora resulta que busca la reelección para fomentar otros siete años de opacidad y corrupción en este organismo.
En diciembre del presente año se vence el periódico para el que fue designado y no le alcanzaron siete años para conocer la rendición de cuentas y mucho menos para realizar con eficacia su tarea medular de auditar todo el recurso público que emplean los tres niveles de gobierno, los ayuntamientos, los organismos descentralizados.
Y luego de que los diputados del PRD y del PAN de la LXXIII Legislatura de Michoacán le perdonaron el “juicio político” y bajo el pretexto de que la Auditoría Superior de Michoacán había sido abandonada por el Congreso del Estado, que no tenía recursos para sacar copias y comprar papelería, para realizar con eficacia su trabajo anunció que renunciaría, pero no cumplió.
El titular del órgano técnico del Congreso de Michoacán, no dio ningún resultado sobre el desfalco financiero que inicio el ex gobernador perredista, Lázaro Cárdenas Batel y agudizo el también ex gobernador perredista, Leonel Godoy Rangel, el cual impuso a López Salgado como titular de la auditoria y tampoco del ex gobernador priísta Fausto Vallejo Figueroa y el sustituto Salvador Jara Guerrero.
Amén de que tampoco fiscalizó la obra de la Presa Francisco J. Múgica, en donde participo la empresa brasileña de Odebrecht y cuyo contrato fue firmado en noviembre de 2006 por Lázaro Cárdenas Batel y que tendría un costo de mil 500 millones de pesos y que sería concluida en octubre de 2008, pero fue entregada en el 2013 y el costo fue de más de 2 mil 915 millones de pesos.
Leonel Godoy entre julio de 2009 y junio de 2010, autorizó a Obredecht contratos extras por mil 441 millones de pesos para terminar la obra con el compromiso de que la obra sería entregada en el 2012, pero la constructora no cumplió y la entregó en el 2013 y dos auditorías revelaron que la presa fue entregada malhecha e inconclusa.
Sin embargo, no pasó nada y el auditor José Luis López Salgado bien gracias y eso m ismo paso con la edificación del Teatro Matamoros, obra que requiere de 100 millones de pesos más para su terminación y que fue entregada por el ex gobernador perredista Leonel Godoy Rangel a Cuauhtémoc Cárdenas Batel, el cual gastó más de 200 millones de pesos en forma discrecional.
Por otro lado, la Auditoría Superior de Michoacán ha sido una agencia de colocaciones de los diputados en turno, en donde llegan los amigos, compadres, amantes y familiares que no tienen el perfil para desempeñar el cargo que les asignan y ante esta situación es urgente que restructurar este organismo y darle autonomía para que n o dependa del Congreso del Estado.
Finalmente los integrantes de la LXXIV legislatura de Michoacán no pueden equivocarse y menos designar una vez a José Luis López Salgado, porque no hubo resultados durante sus casi siete años de gestión en los cuales hizo uso faccioso de los expedientes con irregularidades de ex presidentes municipales que llegaron al Congreso de Michoacán y de los cuatro últimos ex gobernadores del estado de Michoacán.