Morelia, Michoacán, a 19 de mayo de 2020.- La región de Infiernillo o Bajo Balsas es una zona de contrastes; por una parte alberga una alta riqueza biológica con notables endemismos y especies raras, pero por otra constituye una zona con muy alta marginación socioeconómica, una notable adversidad climática, además de presentar altos niveles de inseguridad, aseguró el doctor Arnulfo Blanco García, de la Facultad de Biología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, quien habló sobre la Conservación Comunitaria de la Biodiversidad en esta zona del estado.

En su charla virtual a través de las redes sociales de la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial, Semaccdet, el doctor Blanco García, abundó que “ante semejante panorama socioeconómico se hace indispensable que los sectores académico y gubernamental se involucren en las actividades de conocimiento, conservación, aprovechamiento y divulgación de esta riqueza biológica y que la información sea debidamente socializada entre los propietarios y manejadores de los recursos”.

Indicó que desde hace siete años, alumnos de la materia de recursos naturales de la Facultad de Biología de la Universidad Michoacana a quienes da clase, “han visitado la región del Bajo Balsas, en los municipios de La Huacana, Churumuco y Arteaga, donde se encuentra la Reserva de la Biósfera Zicuirán- Infiernillo, para conocer de cerca proyectos de organización comunitaria, conservación y manejo de la biodiversidad, así como algunos proyectos productivos, que se han implementado en la zona con el apoyo de la Reserva, quienes han trabajado para lograr el empoderamiento comunitario como base para un mejor manejo de los recursos naturales”.

Esta Reserva federal cuenta con una extensión de 265 mil hectáreas, presenta una gran biodiversidad y cuenta con especies endémicas de la zona, además de resguardar 253 especies de aves, 86 especies de mamíferos, 54 especies de reptiles y 15 de anfibios.

Las visitas de investigadores y estudiantes han propiciado diversas acciones participativas de los ejidos y comunidades, tras explicarles la importancia de la riqueza natural que tienen en sus tierras y en la Reserva, lo cual ha derivado en el involucramiento de la misma población para conservar y fomentar el conocimiento tanto de fauna, como de vegetación, además de gestionar y aplicar recursos gubernamentales para proyectos de desarrollo sustentable en las comunidades.

Por ejemplo, se cuenta con comités de vigilancia en algunos ejidos para cuidar sus especies al evitar la caza furtiva; la publicación de un libro que da cuenta de la riqueza natural de la zona; impulsar en algunas zonas la siembra de cultivos como Jamaica y cactáceas con alto valor en el mercado y potencial para reproducción en huertos y repoblamiento silvestre, así como la conservación y monitoreo de la guacamaya verde, entre muchas otras.

La Semaccdet informa que la charla del miércoles 20, se recorre de horario de las 11 a la 1 de la tarde, en la cual la maestra Catalina Rosas Monge, subsecretaria de Gestión Ambiental y Cambio Climático de la Semaccdet, hablará sobre el Programa Especial de Educación Ambiente para la Sustentabilidad: Acciones en Condiciones de Cambio Climático en Michoacán 2020-2021.