Por José Cruz Delgado
Morelia Mich.- Dicen que cuando hay buenos gobiernos hay paz y seguridad, esto viene a colación porque el municipio de Múgica, mejor conocido como Nueva Italia, pese a estar enclavado en Tierra Caliente, no o ha sido invadido por la violencia.
Nueva Italia es un municipio rico en agricultura y en gastronomía, su gente sale a realizar sus labores cotidianas con la certeza de que no serán molestados.
Las autoridades municipales se han esforzado por mantener el municipio tranquilo y ajeno a la violencia, pese a colindar con municipios que se son catalogados como violentos e inseguros.
Pero esa tranquilidad de la que goza Nueva Italia ha sido gracias al buen gobierno que se ha hecho, no solo da seguridad, sino también certeza jurídica a los hombres del dinero para que inviertan.
La Nueva, se encuentra en el estado de Michoacán, a unas dos horas de Morelia y posee una gran riqueza agrícola, se ubica en la llamada Tierra Caliente y se dice que es segunda ciudad más poblada de la región sólo por debajo de Apatzingán y por encima de Ciudad Altamirano, además a nivel estatal ocupa el lugar 16 y a nivel nacional el 290 por su población.
El municipio o poblado fue fundado en el año de 1909 por el italiano Dante Cusi, quien convirtió esa zona de pastizales en una fértil tierra agrícola (hacienda) productora de algodón, arroz, melón, limón y maíz, ya que construyó el Sifón del Marqués, obra maestra de ingeniería que desviaba las aguas del río del Marqués, por medio de una tubería de acero. Esta magna obra, el complejo de riego más grande de Latinoamérica en su época, modificó la llanura en ricos campos de cultivo. Su riqueza estriba en el cultivo de limón, toronja, melón y mango entre otros, es uno de los municipio tranquilos, libre de violencia.
NO CESA LA VIOLENCIA…..Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana es la encargada de encabezar el despliegue especial de todos los programas de bienestar en Aguililla, en un intento de revertir el clima de violencia que hay en esa localidad, sin embargo de nada o poco sirven las fuerzas federales pues continúan los cortes en las carreteras.
El municipio de Aguililla ya es un campo de batalla desde hace mucho tiempo señor presidente, si los habitantes se han revelado es porque se cansaron de la pasividad de los militares, a quienes acusan de proteger a los delincuentes.
Lamentablemente usted les llama provocadores a quienes alzan la voz contra las injusticias, ya solo falta que también les llame fifis, neoliberales y conservadores.
Aquí ya no importa que haya confrontaciones entre grupos de narcotraficantes como lo dijo López Obrador, los habitantes quieren paz, trabajar libremente, y las autoridades tienen la obligación de brindarles esa seguridad, no hay por qué culpar a otros de la fallida seguridad del gobierno federal.
