Nada es tan común como creer
que los demás tienen parte de culpa
de nuestros fracasos.
Truman Capote
Arturo Suárez Ramírez / @arturosuarez
Estimado lector, gracias. Estamos a días de cumplir tres años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y francamente no es lo que se esperaba del tabasqueño, quien seguramente a estas alturas imaginaba un país rendido a sus pies y alabándolo como salvador, quizás calificado como el mejor presidente de la historia o por lo menos al mismo nivel que Benito Juárez, pero se vino la pandemia y se combinó con la incapacidad de funcionarios, la corrupción de sus cercanos, la soberbia por haber ganado el 2018 y la codicia de perpetuar algo que se llama la Cuarta Transformación que ni ellos entienden.
Para los siguientes meses el Pejelagarto irá por tres reformas constitucionales que van a terminar por marcar el sexenio y como ciudadanos debemos estar alertas de cómo se van a presentar, sus discusiones y aprobación, porque van a pasar, a menos que la fuerza que las detenga sea de fuera o circunstancias extraordinarias. Así van por la eléctrica que reforma a la Comisión Federal de Electricidad, otro cambio sería terminar de poner en manos del Ejército a la Guardia Nacional y cambiar las reglas electorales metiéndole mano al Instituto Nacional Electoral.
Esta semana es la reunión de mandatarios entre Canadá, Estados Unidos y México donde en la agenda se abordarán temas importantes para la región, seguridad, la crisis migratoria en la que estamos sumergidos como continente y que se desplazan 1,7 millones de personas, la economía, el T-MEC y ahí las políticas energéticas de los tres países, si los diputados morenos pasan la reforma eléctrica sin cambiar una coma, se pone en riesgo la competitividad y la inversión en el sector, ello podría llevar a que México enfrente litigios y pagar millonarias sumas por capricho del inquilino de Palacio Nacional, quizás por ello su discusión y aprobación la mandaron para el próximo mes de abril.
En el caso de la Guardia Nacional es un proyecto que avanza en silencio y es verdaderamente preocupante que busquen terminar de militarizar al país. Ya la GN tiene un mando militar, aunque este en retiro, pero no hace mucho, varios de los porristas de López subían a las redes sociales sus fotografías con carteles que decían “No a la militarización del país”. Ya se ha empoderado demasiado al Ejército y ya le dieron una muestra al hijo de Macuspana, lo obligaron a que defendiera al general de Peña Nieto, al que le reclamaban que dijera la verdad sobre el caso Ayotzinapa, así la 4T asumió la defensa de Salvador Cienfuegos y sepultó cualquier investigación.
Sobre la Guardia Nacional ahí quedan los números de violencia, 104 mil 796 homicidios dolosos, no hay detención de capos de las drogas, aunque López dice que ya no hay masacres la realidad lo mete en cintura como la jornada violenta que vivió Guanajuato la semana pasada que dejó 15 muertos, también en Tarecuato, Michoacán donde asesinaron a 11 personas. Esa GN que prometió que pacificaría al país, sirve para aplicar vacunas, cuidar los Tianguis del Bienestar, repartir juguetes y corretear migrantes en Chiapas, se los dijo la senadora Lilly Téllez, hasta se saludan con los mafiosos y no pasa nada.
Sin duda alguna el presidente es un tipo perverso, le gusta la campaña política y la estrategia, en la parte de la administración pública no le entiende, es un tipo bastante peregrino, pero ya probó las mieles del poder y la borrachera es grande, así que para continuar con su “proyecto de nación” busca dominar al INE, por ello el recorte de 4 mil 913 millones de pesos, quiere mostrar que es un instituto ineficiente y forzar la reforma electoral, mover todo para sacar a los consejeros Lorenzo Córdova y Ciro Murayama.
Muy al estilo del PRI más rancio como en el que participó Manuel Bartlett, si no ganan, arrebatan y si tienen al Ejército de su lado y al INE infiltrado, pues no habrá manera, no es, pero tiene actitudes de dictadorzuelo… mejor ahí la dejamos.
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Hasta la próxima.
