Por Johnny Town

Una encuesta realizada por Arias Consultores y publicada la semana pasada, aporta datos reveladores sobre la caída de popularidad del prejidente López, quien descendió 9.1 por ciento con respecto a la medición efectuada en febrero por la misma empresa.

Pero más significativo es todavía que pese a los pataleos del propio ganso y su claque en el Senado y San Lázaro, donde Salgado Masjediondo, Perfidio Muñoz Lerdo, Rucardo Monreal, Chucha “la carnitas” Rodríguez, “Napito” y la insufrible Citlalli, alias Yakult Polevnsky, entre otras sabandijas morenistas, que se pararon de pestañas ante el informe de la referida casa encuestadora asegurando que tienen “otroj datoj”, Mjú.

Y es que los números que de acuerdo a los resultados del último sondeo de Arias Consultores y dados a conocer por su director, Luis Octavio Arias, revelaron que MORENA no las trae todas consigo en los últimos días, lo cual coincide con el tropezón del que preside pero no gobierna el país, quien en últimas fechas ha sido constantemente abucheado en eventos públicos, como ocurrió en el estadio de los Diablos Rojos durante la inauguración del estadio que lleva el nombre del propietario del equipo de “Beijbol”: el millonario Alfredo Harp Helú,

Los abucheos y gritos de “¡eeeeeeeeh pluto!” se reeditaron poco después en el aeropuerto de la CDMX y posteriormente en un acto público en Ciudad Juárez, donde al asegurar que la gasolina había bajado de precio en la franja fronteriza, la gente le rebatió al unísono: “nooooooo”, “mentiroso”, y otras linduras que, faltaba más, el ganso, con cara de “se me atoró un hueso”, descalificó a los “fifís” del antiguo Paso del Norte.

Los fríos números contrastan con la supuesta “honey moon” del cansado ganso y el pueblo bueno, que en esta encuesta no patito, al parecer dejó el síndrome del perrito, es decir, ya abrió los ojos y mostró los dientes, pues ninguno de los 5 mejores gobernadores del país, ¡agárrese querido lector!, NINGUNO es emanado de “partido” marrón, y más aún: 4 son panistas y uno, el primer lugar, es del PRI. El PRIAN (hoy PRIMOR) dirán los pejebots.

Además, entre los alcaldes de la capital del país peor evaluados por “Juan Pueblo” aparecen 4 de MORENA y un perredista; ninguno alcanza siquiera el 20 por ciento de aprobación.

Más datos duros: entre los mejores, por decirlo de algún modo, ya que ninguno alcanza el 6 de calificación, por lo tanto resultan “reprobados” por la chilanguiza; los primeros 3 lugares son de la oposición, además, la jefa de gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum (MORENA) reportó números negativos en el “tamiz” ciudadano: ya que solo 36.6 por ciento de votantes aprobó su gestión, contra 45.3 que la desaprueba, cayendo 14 puntos en relación al sondeo de febrero.

LAS CIFRAS DE ARIAS CONSULTORES

Mejores alcaldes de la CDMX: En el quinto lugar se ubica Vidal Llerena (MORENA), de Azcapotzalco con 26 por ciento de aprobación, en la cuarta posición se posiciona Clara Brugada (MORENA), de Iztapalapa, con 28 por ciento; en el tercer sitio se coloca Adrián Ruvalcaba (PRI), con 36.2 por ciento; en el segundo escalón está el panista de Benito Juárez, con 36.3 por ciento, en tanto que, Octavio Rivero (MC) de la alcaldía Milpa Alta se ubica en el primer sitio con 39.8 por ciento de aprobación.

Los peores alcaldes capitalinos resultaron ser: Manuel Negrete (PRD) de Coyoacán, con solamente 8.3 por ciento de calificación; la alcaldesa de Magdalena Contreras, Paty Ortiz (MORENA), alcanzó apenas el 11.8 por ciento de “aprobación”; en Tlahuác, Raymundo Martínez (MORENA) obtuvo 11.9 por ciento, mientras que a Layda Sinsabores, perdón, Sansores (MORENA), un pírrico 19.2 por ciento de ciudadanos en Álvaro Obregón “aprueban” su gestión.

Los gobernadores peor evaluados son: Antonio Medina de Tlaxcala (PRI) se adueñó del sitio 28 con 16 por ciento de votantes; en el lugar 29 se encuentra Cuauhtémoc Blanco Bravo (PES), de Morelos con el 12.8 por ciento; el panista Javier Corral, de Chihuahua, alcanzó un porcentaje 12.0 que lo coloca en el peldaño 30; mientras que Francisco Vega (PAN) se ubica en el lugar 31 con 11.8 por ciento de aprobación, y en el último lugar se sitúa el Independiente Jaime Rodríguez “El Bronco”, de Nuevo León, con un pobre 9.5 por ciento de aprobación.

Llama la atención que ningún mandatario estatal surgido de MORENA figura entre los mejores y un góber del PRI resultó ser el mejor evaluado, mientras que el PAN se adueñó de 4 escalones: El quinto lugar es para el tamaulipeco Francisco García Cabeza de Vaca (PAN), con 47.8 por ciento de aprobación; le sigue en la cuarta posición Martín Orozco, gobernador panista de Aguascalientes con 49.7 por ciento de votantes a su favor; el tercer lugar le pertenece a José Rosas Aispuro, de Durango, con 52.8 por ciento de aprobación, también de Acción Nacional; el segundo lugar se lo ganó el yucateco Mauricio Vila (PAN), con 64.7 por ciento de votación a su favor, y en el lugar de honor se ubicó Quirino Ordaz Coppel, gobernador priísta de Sinaloa, quien obtuvo 65.1 por ciento de aprobación.

De las cifras aportadas por los sondeos de Arias Consultores podemos concluir que el hecho de tener una buena relación con el presidente, no garantiza que los ciudadanos aprueben la gestión de gobernantes locales y estatales.

Por último, como dijimos líneas arriba, el preciso López Obrador bajó sus niveles de aprobación en relación al mes de febrero: 56.5 de ciudadanos avalan su gestión, mientras que el 33.8 por ciento lo desaprueban y para el 9.6 por ciento, el ganso resulta indiferente, o sea que “ni fú ni fa”, no ata ni desata.

El informe detalla que de diciembre a febrero, en cada evaluación el tabasqueño subía su popularidad en un margen de entre 3 y 6 puntos; la correspondiente a febrero reportó una aprobación de 65.6 por ciento a su gestión; sin embargo, en marzo sus números empezaron a descender, reflejando al cierre del mes un desplome de 9.1 por ciento. Duro golpe a su marcado egocentrismo.

Según Arias, influyó en la caída de Andrés López el desempeño negativo de gobernadores surgidos de las filas de MORENA, algunos legisladores y funcionarios de su gabinete, así como su no muy clara manera de comunicar las cosas.