Por: Fernando Pérez Chávez
A 11 Años de los Granadazos.
#La Impunidad e la Injusticia#.
El Calvario de las Víctimas.
El próximo domingo se cumplen 11 años de los granadazos en el Centro Histórico de Morelia y no ha habido justicia ni reparación del daño para los afectados de los 11 muertos y 104 heridos, la impunidad ha sido la constante y la investigación a cargo de la PGR, ahora Fiscalía General de la República sigue empantanada.
Después del atentado terrorista, el entonces gobernador perredista de Michoacán, Leonel Godoy Rangel, atribuyó el ataque a la delincuencia organizada y la PGR, en ese entonces encabezada por Eduardo Medina Mora (hoy ministro de la Suprema Corte), estableció como principal línea de investigación que el cártel de Los Zetas era el responsable.
En septiembre de 2008 se anunció la detención en Apatzingán de cuatro personas, supuestamente implicadas en los hechos y la entonces titular de la Subsecretaría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada, Marisela Morales, dijo que los detenidos habían sido localizados gracias a una llamada anónima, y que habían confesado ser parte del grupo delictivo y responsables del ataque.
Sin embargo, pocos días después de la captura, los detenidos señalaron ante el juez que su “confesión” era falsa y que habían sido torturados para declararse culpables, una práctica empleado la PGR en otros casos y por esa situación interpusieron demandas de amparo en contra del auto de formal prisión, así que en mayo de 2015, un juez federal concedió el amparo a los detenidos, que llevaban siete años encarcelados, y ordenó su libertad.
El juez destacó que diversos exámenes periciales confirmaban que los detenidos habían sido torturados, y que no se respetaron sus derechos, además de que una de las firmas plasmadas en una declaración ministerial no correspondía al puño y letra del detenido, lo que evidenciaba que era un testimonio fabricado. Finalmente se demostró que tres de los detenidos estaban en el municipio de Lázaro Cárdenas el día que se les detuvo y no en Apatzingán como aseguraron las autoridades.
Por otro lado, luego de estar a la deriva las víctimas el gobernador Silvano Aureoles Conejo ha venido apoyándolas y el miércoles pasado sostuvo un encuentro con los afectados y les entregó seis casas a los deudos de las familias que faltaban de recibir este beneficio, en las la inversión fue de 2 millones 400 mil pesos y en total ha entregado 17 inmuebles y les aseguró que no están solos.
Finalmente el gesto de Aureoles Conejo sin lugar a dudas es bueno, pero persiste la deuda moral con los afectados del sangriento episodio porque las autoridades no han cumplido con el esclarecimiento del caso y con el castigo a los responsables, amén de que no hay detenidos.
