Ciudad de México, a 14 de septiembre de 2021.- Por la violación sistemática de sus derechos y para proteger las garantías individuales y ciudadanas, el gobernador Silvano Aureoles Conejo acudió a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) a presentar una denuncia.

“Mi denuncia no es de interés particular; represento a cinco millones de michoacanos que viven en el estado; a cuatro millones más que viven en los Estados Unidos, y a millones de mexicanos que comparten nuestra profunda preocupación por la democracia y el futuro de México”, enfatizó el gobernador afuera de la sede de la CNDH.

Destacó que en su denuncia, dirigida a la presidenta de la CNDH, María del Rosario Piedra Ibarra, incorpora todos los señalamientos de la intromisión de la delincuencia organizada en el proceso electoral del pasado 6 de junio en Michoacán, así como el conjunto de solicitudes de audiencia hechas al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Comentó que por una simple cuestión de respeto y por ser el titular del Poder Ejecutivo del país, el presidente debería recibirlo y atender los temas que concierne a la seguridad de la nación.

Sin embargo, puntualizó que en lugar de eso, ha sido amenazado, ofendido y desacreditado por personas afines al presidente de México o a su partido, Morena.

“Tengo muchas amenazas de gente cercana a él, a su partido (Morena), y tengo denuncias ante la Fiscalía General de la República por traición a la patria, esa es la narrativa que utilizan”, señaló Silvano Aureoles.

En opinión del gobernador, es inconcebible que, en este país, personajes que ocupan espacios de poder, que forman parte del gobierno federal, puedan amenazar, sin pruebas, sin que exista un proceso legal abierto, a un gobernador con enviarlo a una cárcel de máxima seguridad. Acciones de este tipo representan un abuso del poder y son actos claros de persecución política. El nuevo régimen usa las mismas prácticas del régimen que prometió combatir.

Indicó que no descansará y atenderá la indicación que le dieron representantes de la CNDH para ser recibido el jueves 16 de septiembre por la ombudsman María del Rosario Piedra y continuar su lucha por la democracia y la seguridad nacional para evitar que México se convierta en un narcoestado.