LA COLUMNA: Impunidad y encubrimiento.
Por José Cruz Delgado
Si en algo se caracteriza esta administración estatal morenista es por la impunidad y el desinterés por resolver los problemas que aquejan a lo población en general.
Por un lado están los normalistas que siguen haciendo de las suyas, secuestran y queman unidades cada vez que se les da la gana para después huir como viles gavilleros.
Lo más lamentable es que estos delincuentes disfrazados de normalistas son solapados por las propias comunidades indígenas cómo si les hicieran un favor, sin darse cuenta que al avalar esas actividades ilícitas se convierten en cómplices, pero tampoco nadie los puede tocar porque de inmediato se hacen las víctimas y acusan a las autoridades de represoras y para evitar que haya alguna acción en su contra cierran carreteras.
El gobierno estatal prefiere hacerse de la vista gorda y no aplicar la ley porque tanto los indígenas cómo los normalistas y los de la CNTE son sus amigos dejando en indefensión al resto de la población que es quién paga las consecuencias por los desmadres de ambos grupos.
Así que viva la impunidad y que siga el desmadre de normalistas al fin y al cabo no hay ley ni orden en Michoacán porque hay un gobierno timorato y valemadrista, pero eso sí, mentiroso como nadie.
Pobre Michoacán y pobres michoacanos están peor que antes.
Morena y sus gobernadores, está comprobado, no gobiernan en realidad, son títeres del que habita en Palacio Nacional y no mueven un dedo si no les ordena el cuatrotero López Obrador.
