Morelia, Mich a 19 de junio del 2019.- Notable la falta de fuerza que tiene el grupo que encabeza Ascensión Orihuela a nivel nacional, hoy su candidato a la dirigencia nacional se baja de la contienda y renuncia al partido.

Lo anterior tras el anuncio de José Ramón Narro Robles a su dimisión , lo que denota la disminución del grupo de “los chones” y con ello reconocen que no cuentan con los elementos suficientes ni con los aliados para encabezar al partido más grande de México.

Ante la falta de propuestas sólidas que requiere hoy el partido para salir avante y recuperar la confianza de la ciudadanía, la renuncia demuestra a la militancia que se excusan detrás de una supuesta simulación para la ejecución de la elección del 11 de agosto.

Después de 17 años el PRI voltea a ver a la base y con el voto en las urnas decidirá quien será su dirigente para crear consensos y con ello llevar a un buen puerto al tricolor, devolviendo la confianza a quienes a un creen en el partido y en sus políticas.

El debacle del grupo de “Los Orihuela” es palpable, y así lo demostaron en las pasadas elecciones en la entidad, confabulados con la dirigencia nacional que encabezaba Enrique Ochoa, demostraron que los candidatos impuestos por ellos no fueron capaz de ganar un puesto político.

Así lo demostraron sus candidatos al Senado, Xochitl Ruíz y Toño Ixtlahuac, que en la votación quedaron por debajo de la media que manejaba normalmente el PRI en el estado, apesar que la dirigente de la CNOP- a quien ppr cierto ya se le venció el plazo- se ufana en decir que tiene más de 10 mil agremiados, votos suficientes para ganar una curul.

José Narro, con la decisión que hoy toma, de bajarse antes de que inicie la contienda, demuestra que no tienen el respaldo suficiente para enfrentar las urnas ni siquiera al interior de su partido.