>Por: José Cruz Delgado

Igual que Judas Iscariote traicionó a Jesús, Medardo Cerna traicionó a Silvano por dinero
El rector entregará en bandeja de plata la Rectoría a MORENA
Cerna González se vendió a López Obrador y Roberto Pantoja

Tal y como se esperaba, el gobernador Silvano Aureoles Conejo y el Rector de la Universidad Michoacana Medardo Cerna Gonzáles han caído en las descalificaciones y en los dimes y diretes.

Es un secreto la simpatía que le tiene Cerna González al presidente electo Andrés Manuel López Obrador desde antes de las elecciones del primero de julio, incluso se reunió con el futuro Jefe de la Nación quien le prometió que de llegar a la presidencia le iba a resolver los problemas financiero de cada año que según dice la autoridad nicolaita ascienden a más de mil millones de pesos y por eso le llaman “Lord mil millones”.

De entrada, el rector traicionó a Silvano, pues es de recocerse que el mandatario siempre se ha preocupado por sus problemas económicos y siempre ha hecho hasta lo imposible para sacarla adelante y Cena Gonzáles le pagó con ingratitud y se arrojó sin pensarlo dos veces a los brazos de López Obrador y del futuro Virrey Roberto Pantoja Arzola, seguramente para asegurar su futuro político y la de sus más allegados quienes son los que han hundido a la Máxima Casa de estudios junto con el dirigente del Sindicato Único de Empleados que dirige el “demócrata” Eduardo Tena, pero además, posiblemente haya pactado para que el próximo rector salga de las filas de MORENA, algo que ya están cocinando a cambio de dinero.

Medardo Cerna González, como Judas Iscariote, por monedas traicionó a Silvano y es un secreto a voces.

Silvano Aureoles Conejo le pidió al rector que dejara de partidizar y politizar a la Universidad y fuera más prudente y cuidadoso en sus peticiones porque la SEP ya no le quiere dar un centavo a la UMSNH, porque “en la forma de pedir está el dar”, y dijo que la Universidad no se va a quedar sola y se harán las gestiones necesarias para que salga avante de su crisis financiera, sin embargo le mandó a decir al rector que le baje a la confrontación y transparente sus gastos y que una de las situaciones por las que les han negado dinero en la SEP es porque dicen que no hay transparencia en el gasto de la Universidad”, clarificó.

Cerna González ha dicho que requiere para cerrar el año mil 50 millones de pesos pero que un estudio hecho por la propia Secretaría de Educación Pública reveló que sólo requiere 600 millones de pesos.

Y sobre el tema del dinero, el secretario de Fianzas, Carlos Maldonado Mendoza, aseguró que las declaraciones del rector de la UMSNH, Medardo Serna González, no son ciertas y lo calificó de mentiroso porque el gobierno estatal siempre ha cumplido puntual y cabalmente con el convenio de la federación y el estado.

Asegura que el gobierno, con el convenio del subsidio destinado a la Universidad Michoacana, de 2016 a 2018 se le ha entregado un monto de dos mil 56 millones de pesos, adicional al recurso extraordinario que asciende a 700 millones de pesos y a la vez  desmintió que haya recortes para la Máxima Casa de Estudios y compartió que durante los últimos tres años, la actual administración estatal no ha dejado de aportar los recursos ordinarios establecidos en el Presupuesto de Egresos, analizado, valorado y aprobado por el Congreso del Estado.

Asentó que el Gobernador Constitucional, Silvano Aureoles Conejo ha sido aliado permanente de la UMSNH desde su cargo como Senador de la República y luego, presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, en todo momento ha gestionado recurso para la Universidad y como gobernador no era la excepción.
Descartó que la dificultad financiera se solucione abandonando las aulas o los centros de trabajo, para tomar las calles; por el contrario llamó a la suma de voluntades a favor de la educación de la juventud, donde son bienvenidas las aportaciones de todos y todas, a fin de que no se partidice y politice el tema, que sólo lacera a la sociedad.

Y por otra parte, sucede que en distintas escuelas y facultades de la Casa de Hidalgo, profesores del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana desconociron la autoridad del rector Medardo Serna, de quien dijeron no tener calidad moral para convocar a la unidad de la Universidad y ambién, desconocieron al secretario general el Gaudencio Anaya Sánchez.

En un desplegado, fijaron su postura y se pronunciaron en contra de la “marcha por la defensa de la universidad” que realizaron el rector, Cerna González, Eduardo Tena del SUEUM y Gaudencio Anaya del SPUM.

Según lo señalaron, el rector no es el indicado moralmente para convocar a la unidad de la comunidad ni tampoco el dirigente del SPUM quien ha incumplido los acuerdos de los órganos superiores de dirección en su afán de servir a la Rectoría.

A través del comunicado público señalan que la sumisión del secretario general sindical al representante de la Universidad no es novedosa, ya que ya con anterioridad había firmado también, sin tomar en cuenta a las bases sindicales un acuerdo comprometiendo que el sindicato no suspenderá labores, aun si en este cierre de año se detiene, como en 2017, el pago de los salarios y exhibieron la falta de resultados de este tipo de “desfiles” (marchas) que acostumbra hacer Medardo Serna.

Pues así las cosas, y todo indica que esta telenovela dará para muchos capítulos más por lo que el final será hasta que Medardo Cerna González, rector de la Universidad Michoacana deje le Rectoría en manos del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) para mantener el control absoluto como lo quieren hacer no solo en Michoacán sino en todo el país a través de Virreyes.

Silvano Aureoles, y es verdad, nunca ha dejado a su suerte a la Casa de Hidalgo, hay que reconocerlo, se ha esforzado por sacarla delante de sus problemas económicos creados por las propias autoridades universitarias y los líderes sindicales que siempre se han negado a rendir cuentas, y es por eso que cuando se les pidió que clarificaran gastos pegaron el grito en el cielo y empezaron a realizar marchas en defensa de “su universidad”.

¡Vaya descaro!