Por: José Cruz Delgado
¿Quién dice que la CNC está muerta?
Xóchitl Ruiz, una perdedora que no tiene capital político propio
Sin duda alguna la Confederación Nacional Campesina (CNC) sigue siendo la que mayor votos aporta al Partido Revolucionario Institucional en cada elección, pero también aporta mucho capital político con hombres y mujeres con muy buenos perfiles.
La Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de Michoacán, como también se le conoce, es presidida por Jesús Luna Morales quien se ha caracterizado por su lucha constante por los hombres del campo, sobre todo con los que menos reciben, y aunque realiza un trabajo constante, para muchos no se ve porque quieren que dicha central salga y tome calles, oficinas y carreteras, sin embargo, los apoyos obtenidos se reflejan en el campesinado humilde.
“No estamos quietos, estamos trabajando fuerte para apoyar a los campesinos de todo el estado, sobre todo a los que resultaron afectados por las lluvias, somos una organización inquieta y no nos estancamos”, señala Luna Morales.
Quién diga que la CNC está muerta se equivoca, está más viva que nunca.
En el terreno electoral la central campesina sigue ganando batallas con la aportación de los mejores hombres y mujeres, lamentablemente no le han dado lo que realmente merece, prueba de ello es que quienes se apoderaron del pasado proceso electoral próximo pasado jamás llamaron a la mesa de negociaciones a los cenecistas.
De todos es conocido que unas cuantas personas perversas encabezadas por el maquiavélico Enrique Ochoa Reza secuestraron el proceso electoral en Michoacán y les cerraron el paso a los líderes naturales de la CNC que aspiraban un puesto de elección popular impidiendo el triunfo en muchos ayuntamientos y diputaciones tanto locales como federales.
Si esos siniestros personajes no hubieran metido la mano otro gallo cantaría.
El líder cenecista fue directo y claro, habló sin tapujos para este medio de comunicación y criticó aquellos que en lugar de aportar al Partido Revolucionario Institucional lo critican y hasta acuden a la Ciudad de México para denostar y hablar barbaridades de quienes sí trabajan y son fieles al tricolor.
Efectivamente, no se equivoca Luna Morales, lo hemos comentado en entrega anteriores, los que no quieren al PRI, pero que dicen pertenecer a él son los traidores, aquellos que arrojan la piedra y esconden la mano, son esos canallas, perversos y siniestros personajes que en las penumbras conspiran contra el tricolor, y tienen nombres y apellidos, empezando por Enrique Ochoa Reza, Tinoco Rubí, Chon Orihuela y hasta el nefasto ex gobernador castillista Salvador Jara Guerrero que sin ser priista quiso también meter la mano en el pasado proceso electoral, estos son solo algunos.
Tiene mucha razón el dirigente campesino al reprochar que la CNC tiene con qué pero políticamente no le han hecho justicia. En las plurinominales locales prefirieron dar un mejor lugar al líder antorchista Omar Abud Carreón que a Luna Morales y la pregunta fue ¿qué méritos hizo Abud Carreón para que ahora sea diputado?
Hoy se sabe que Omar Abud Carreón obtuvo el lugar cinco en las plurinominales gracias a los innombrables y a que éste se arrojó a los brazos de Chon quien lo cobija a cambio de apoyar a su “bebé” Eduardo Orihuela.
Luna fue más allá al decir que muchos priistas que no fueron favorecidos por las malas decisiones de los innombrables se fueron a otros partidos y ganaron, ahí está la prueba de que la CNC tenía los mejores perfiles.
Quizá haya muchos que piensan que la central campesina está muerta porque no toma calles ni bloquea carreteras, pero el trabajo que realiza calladamente en bien de los campesinos es de todos conocidos y no tiene por qué hacer tanto escándalo, lo único que sí es cierto es que no se le ha hecho justicia políticamente hablando.
Por cierto, alguien de los innombrables le ha vendido la idea a la llamada dirigente de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) Xóchitl Gabriela Ruiz González para que busque la dirigencia del Organismo Nacional de Mujeres Priistas en Michoacán y para lograrlo se dice que fue a la ciudad de México para buscar apoyos.
Ruiz González fue diputada local prurinominal en la pasada Legislatura gracias a un innombrable, quien por cierto también la hizo dirigente del sector popular, y siendo mujer nada hizo por ellas, así que ¿con qué calidad moral pretende ser líder de una organización como la OMPRI?
Ruiz González es una perdedora, no tiene nada políticamente hablando, pero es protegida por una pandilla política que siente que todo merece y sin mérito alguno fue designada como dirigente de la CNOP y luego diputada por el PRI al Congreso de Michoacán y finalmente candidata al Senado que por cierto le dieron una paliza en la votación.
Por cierto, como ya concluyó su periodo al frente de esa organización adherida al PRI, ahora busca cobijo en otra, pero seguramente no ganaría ni la elección para encargada del orden en su colonia, a no ser que sea impuesta como siempre que al fin y al cabo ya está acostumbrada.
En sí, Xóchitl una perdedora que nunca ha tenido y ni tendrá capital político propio.
