Por: José Cruz Delgado

Defensora de pobres y vive entre la riqueza y opulencia

La diputada local de MORENA, Cristina Portillo Ayala, presentó una iniciativa en donde señala que en Michoacán se debe avanzar en una política salarial de la alta burocracia, que sea congruente con la realidad que viven millones de trabajadores asalariados y no asalariados de México.

“Y hacia la congruencia debemos apuntar porque una verdad irrefutable, es que no puede haber un gobierno rico y un pueblo pobre y miserable”, es por ello que propuso una reforma a la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Michoacán de Ocampo para aprobar próximamente la Ley de Austeridad Salarial de los Servidores Públicos del Estado de Michoacán.

Esta congruencia significa establecer un sistema de sueldos, que permita vivir decorosamente a los integrantes del gobierno, pero que no insulte a la mayoría de los mexicanos que hoy apenas sobrevive con un sueldo diario mínimo de 88 pesos y 36 centavos.

“En esa danza de las cifras y los sueldos, el más afectado, es el pueblo michoacano, pues con resultados de la administración que están a la vista, no se justifica que un funcionario gane 40 veces más de lo que gana el más pobre de los obreros pobres.”

La iniciativa constitucional con proyecto de decreto fue turnada a las comisiones correspondientes para su análisis y dictamen. Cristina Portillo Ayala aseguró que este paquete de reformas tiene como finalidad “…  no a la luz de una propuesta de un grupo político, sino por los más humildes y por los más pobres”, y concluyó: “… en la medida que respondamos como poder legislativo a los más necesitados, en esa medida nos ganaremos el respeto de los ciudadanos”.

Pues bien, el reconocido periodista Jorge Hidalgo Lugo, titular del portal de noticias Portal Hidalgo, hizo público un reportaje en donde afirma que con observaciones pendientes del manejo poco aseado que hizo con el recurso público que tuvo a su disposición durante su paso como titular de la extinta Secretaría de la Mujer en el sexenio de Leonel Godoy, ahora Cristina Portillo pretende tender una cortina de humo al reclamar que se normen los “salarios de la alta burocracia” por decreto de ley.El efecto distractor tendría respaldo sin duda, de no ser porque la diputada por Morena en la LXXIV Legislatura local, acumuló en su pasado como representante popular y funcionaria siempre por el PRD -no se cuenta su pasado gris como burócrata municipal de medio pelo-, un patrimonio significativo y no precisamente por gozar de excelentes ingresos por ser miembro de esa “alta burocracia” que hoy repentinamente, parece incomodarle al grado de la satanización y linchamiento mediático.

En el abigarrado lance que esgrime como exposición de motivos cuando dice que “en Michoacán debemos avanzar en una política salarial de la alta burocracia que sea congruente con la realidad que viven millones de trabajadores asalariados y no asalariados de México. Y hacia la congruencia debemos apuntar porque una verdad irrefutable, es que no puede haber un gobierno rico y un pueblo pobre y miserable”, la legisladora deja abierta la puerta para el contraste.

Esto porque precisamente, en su haber la diputado por Morena cuenta con siete propiedades distribuidas en diferentes zonas de la capital michoacana.

El comunicador señala que su fortuna (de Portillo Ayala) incluye tres inmuebles residenciales en la colonia Chapultepec Sur, por los que se estima pagó 4 millones 680 mil pesos -pero que su valor comercial hoy en día podría casi triplicar esa cifra-, y uno más en un fraccionamiento privado que se ubica sobre la calle Vicente Santa María, en la zona Centro de Morelia.

Y la incongruencia aflora cuando Portillo Ayala clama por establecer un sistema de sueldos, “que permita vivir decorosamente a los integrantes del gobierno, pero que no insulte a la mayoría de los mexicanos que hoy apenas sobreviven con un sueldo diario mínimo de 88 pesos y 36 centavos”, cuando la diputada posee una lujosa propiedad de más de 500 metros cuadrados en el exclusivo Fraccionamiento Residencial Américas Britania, que cuenta con accesos controlados y su propio club social con áreas deportivas, que difícilmente podría haber adquirido con una restricción salarial como la que ahora pretende.

A contra pelo de su encendida defensa para posicionar la iniciativa de marras, Cristina Portillo exclamó que “lo más alarmante o inequitativo, de acuerdo al tabulador con la remuneración salarial de mandos medios y superiores de Michoacán, es que existen funcionarios del gabinete estatal que ¡ganan más que el gobernador!”.

Sin embargo omitió decir, quizá por pudor morenista, que la residencia de su propiedad ubicada sobre Avenida México, número 1061, tiene un valor superior a los 5 millones 750 mil pesos, dato que puede consultarse en el Registro Público de la Propiedad y cuyo pago no se explica en un proyecto de austeridad republicana como el que ahora engañosamente pretende vender a sus representados.

Arrojada y valiente, sin duda, lo expuesto por la representante popular quien argumentó que “en la lógica que no puede haber un gobierno rico y un pueblo pobre, en Michoacán, los integrantes de la fracción legislativa de Morena presentaron desde el principio de esta Legislatura, una reducción de los salarios de las y los diputados, y la respuesta fue sorprendentemente positiva, lo que permitió un acuerdo político para que nuestros sueldos no superen el tope salarial impuesto al propio presidente entrante”.

Pero omitió deliberadamente señalar que a toro pasado es mejor buscar ser “pobre” cuando ya se tiene entre los numerosos bienes también una casa habitación ubicada en una zona de condominios en el número 160 de la calle Vicente Santa María. Esto sin descontar otra casa habitación más en la calle Andador Miguel Ortega, de la Unidad Habitacional Lomas de Hidalgo y un departamento en la calle Mariano Elízaga, en el Centro Histórico.

Hidalgo Lugo escribió que es una lástima que sus argumentaciones no estén en concordancia con su haber patrimonial sobre todo si recordamos los vehículos de lujo que ostenta, incluyendo un Audi del año que supuestamente se ganó por sus buenos oficios como vendedora de productos de belleza.

“En Michoacán, el salario de la alta burocracia debe ser congruente y no ofender a los ciudadanos”, reclamó Cristina Portillo… pero de aquí en adelante porque lo antes obtenido, como decía el Filósofo de Güemes:

-“Lo que ya cayó, me lo chingo yo…”

Lo denunciado por el comunicador fue denunciado anteriormente por la dirigencia estatal del PRD en Michoacán, que en ese entonces era encabezada por Martín García Avilés, había dado a conocer una lista de propiedades de Cristóbal Arias Solís, Raúl Morón y otros importantes políticos, entre ellos Cristina Portillo Ayala a quien acusó de poseer siete propiedades distribuidas en diferentes zonas de la capital michoacana, lo que reafirma lo publicado por Hidalgo Lugo.

Fue a finales del pasado mes de junio que en rueda de prensa García Avilés denunció la fortuna de Portillo Ayala y afirmó lo siquiente: “Su inexplicable fortuna incluye tres inmuebles residenciales localizados en las calles 13 de Septiembre y Bernal Díaz del Castillo, de la colonia Chapultepec Sur, por los que pagó 4 millones 680 mil pesos –pero que su valor comercial hoy en día podría casi triplicar esa cifra-, y uno más en un fraccionamiento privado que se ubica sobre la calle Vicente Santa María, en la zona Centro, también con un valor estimado en dos millones”.

Asimismo Portillo Ayala tiene “una lujosa propiedad de más de 500 metros cuadrados en el exclusivo Fraccionamiento Residencial Américas Britania, ubicada sobre Avenida México, número 1061, abarcando una amplia esquina, y que como ustedes saben, es un complejo residencial que cuenta con accesos controlados y su propio club social con áreas deportivas; la residencia tiene un valor superior a los cinco millones 750 mil pesos.

“Sin embargo, hoy la vemos nuevamente en colonias donde la gente vive en condiciones realmente precarias y vulnerables, pidiendo el voto para seguirse enquistando en el erario.

Cuenta también con una casa habitación ubicada en una zona de condominios en el número 160 de la calle Vicente Santa María, y una casa más en la calle Andador Miguel Ortega, de la Unidad Habitacional Lomas de Hidalgo, así como un departamento en la calle Mariano Elizaga. Todo ello, sin contar los vehículos de lujo que ostenta”.

En torno a Raúl Morón Orozco, hoy alcalde por MORENA de Morelia, detalló que en ese momento que es un maestro que comenzó su carrera desatando el caos mediante la toma de calles, carreteras, bancos y edificios públicos como dirigente magisterial, y que después incursionó en la política, “hoy cuenta con cinco propiedades, con un valor millonario, adquiridas tanto en la capital michoacana como en el interior del estado”.

García Avilés recordó que Morón Orozco fue encarcelado en 1990 y recluido en el penal “Francisco J. Múgica” por los disturbios que ha protagonizado junto con otros líderes magisteriales, además de que en Maravatio dijo que al parecer tiene asignada su clave escolar como docente sin dar clases desde hace más de dos décadas.

Pues bien, lo dicho por el ex dirigente perredista reafirma lo escrito y publicado por el comunicador Jorge Hidalgo Lugo.

Quizá por lo escrito en este espacio, la pobre legisladora, hoy morenista, Cristina Portillo Ayala amenace con tomar acciones legales contra aquellos que se atreven a poner en tela de juicio su honorabilidad y su “lucha en favor de los que menos tienen”, pues para ella es difamación de honor y no acepta críticas de periodistas aunque su actuar deje mucho que desear.