Por: Celeste Orozco
Hemos escuchado comparativas haciendo alusión a la calidad de vida que tienen los países nórdicos siendo países con un modelo económico socialdemócrata y el por qué México no replica ese modelo.
Se ha defendido ciegamente al socialismo sin conocer que es lo que trae consigo, básicamente lo que el socialismo promulga es lo siguiente:
Eliminación de una libre economía individual y la propiedad privada.
Reducción de la riqueza heredada y los ingresos materiales
Servicios de bienestar social proporcionados por la bolsa colectiva
Búsqueda de igualdad económica-social
Monopolización del Estado, lo cual implica que el estado es la única empresa proveedora, es decir, eliminación de la diversidad empresarial así como la ley de la oferta y demanda (en el socialismo puro no hay competencia)
En el caso de países nórdicos como Noruega, Finlandia, Suecia, Dinamarca, etc., el modelo político y económico es una democracia social, lo cual no es lo mismo que un socialismo puro, el cual fue implementado con bases sólidas y libertad económica. El índice de Libertad Económica en el Mundo establece los siguientes puntos para determinar la libertad económica de un país como lo son; sistema jurídico y derechos de propiedad, solidez de la política monetaria, libertad de comercio internacional y regulación de mercados crediticio, laboral y comercial.
Tomemos como ejemplo Noruega que se encuentra dentro de los países con mayor calidad de vida… ¿Qué hay con Noruega que no haya en México?
Absolutamente todo, desde gran libertad económica, así como muy buena protección a los derechos de propiedad, estado de derecho confiable y eficiente, bajos aranceles, apertura a la inversión extranjera, aprovechamiento de recursos naturales y un alto nivel de confianza entre los ciudadanos y en la relación gobierno-ciudadanos, situación que no suena para nada como un socialismo puro porque simplemente no lo es.
¿Qué sucede entonces en países como Venezuela?
Venezuela es un país con un gobierno corrupto, autoritario y una economía tambaleante a pesar de ser sumamente rico en petróleo, Venezuela sobreexplotó dicho recurso desde los 70´s y con su socialismo del siglo XXI propició la destrucción de la economía interna creando una enorme fuga de capital y talento confiscando empresas y elevando los precios de manera general.
Considero adecuado reflexionar sobre qué modelo político y económico es más parecido al que tenemos actualmente en México y cuál sería el desenlace más probable ante este panorama.
